Eres mirada fría,
ocultando la fragilidad de una ausencia,
pues aunque tus ojos me naveguen con distancia,
descubro en ellos el llanto de un ángel marino en soledad.
/
Tal vez he llegado tarde para consolarte,
pero siempre estará cerca de tus fronteras mi noble mar:
tranquilo como estanque de agua dulce,
preparado para recibir las tiernas y salobres lágrimas,
que un día pudiste derramar en un abismo sin fondo.
/
"¡Cómo quisiera ser tu océano!",
es un deseo reservado sólo para mí,
cuando tus veleros del oriente
se detienen ante las costas de mi corazón.
1 comentario:
Aunque solo un poema veo
es sublime la escencia
de vos que acudís
al firme deseo
de compañía al desolado angel aislado en el mar, que noble resfuerzo, el amor llega en momentos oportunos, un auxilio para el angel, que se alza como luna en tu horizonte siendo guía...
Poeta, Si otra petafora ubiérais introducido, en otra estrofaseñalado una pasion hacia el angel, serías romántico éroe para la luna que se fuga y retienes (salvacion?), o se fuga de tu vida...
Orión, Venezuela.
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